ROSTRO NACIENDO DE LA LLUVIA
El vientre de la noche ha parido una estrella
que gira
nerviosa
en tu frente.
Una estrella diminuta que nadie puede ver.
Imagino cómo será tu rostro naciendo de la lluvia.
Está pasando el tiempo.
(Hay un espejo ante ti
que guarda
el dolor de tus pupilas).
© Javier Díaz Gil
1 de enero de 2009
3 comentarios:
Hola Javier
Ha pasado el tiempo, las gotas han surcado el rostro.
Hay huellas que la lluvia beberá, ya no serán cicatrices.
Un abrazo
Cómo transpúa dolor y purificación a la vez este poema: renacimiento de un rostro que la lluvia refresca.
Buena entrada de año con este poema.
Un abrazo
Javier, que me parece que he perdido un comentario tuyo en mi blog. Te lo explico no sea que te vayas a pensar que lo he eliminado yo, nada más lejos.
Besos
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