Internet gratis por 30 euros.
La calle está llena de sorpresas. Solo hay que fijarse. Y en la parada del autobús me he encontrado este anuncio: Internet gratis por 30 euros.
Esto parece ya una contradicción en el enunciado y no he podido evitar pensar con mi "lado lingüístico" y encontrar aquello como un perfecto ejemplo de una figura literaria, el oxímoron.
De nuevo, Wikipedia, que todo lo sabe, nos define oxímoron, como:
El oxímoron (del griego ὀξύμωρον, oxymoron, en latín contradictio in terminis), dentro de las figuras literarias en retórica, es una figura lógica que consiste en usar dos conceptos de significado opuesto en una sola expresión, que genera un tercer concepto. Dado que el sentido literal de oxímoron es opuesto, ‘absurdo’ (por ejemplo, «un instante eterno»), se fuerza al lector o al interlocutor a comprender el sentido metafórico (en este caso: un instante que, por la intensidad de lo vivido durante su transcurso, hace perder la noción del tiempo).
El recurso a esta figura retórica es muy frecuente en poesía mística y amorosa, por considerarse que la experiencia de Dios o del amor trasciende todas las antinomias mundanas.
Los que han puesto el anuncio, pensé, tienen una capacidad literaria, metafórica, especial para atraer la atención del paseante, son buenos publicitarios.
Pero, ay, amigo. Este oxímoron está muy cerca del delito (si no son, en este caso, el oxímoron y el delito la misma cosa ya) porque si seguimos leyendo, estos señores te proponen cobrarte 30 euros por piratearte la contraseña del vecino y que no tengas que pagar Internet en el futuro.
Internet gratis por 30 euros.
Como comprenderéis, dejo el ejemplo como oxímoron pero borro de la foto los teléfonos de contacto y el email no vaya a convertirme yo en cómplice del delito.
Para terminar y, para elevar un poco el nivel del oxímoron y de los autores, os dejo aquí ejemplos de oxímoron, de ese mismo artículo de Wikipedia, que seguro son mucho menos delictivos:
Ejemplos
«Festina lente», ‘apresúrate lentamente’ (César Augusto, 63 a. C. – 14 d. C.)
[El amor es] «vista ciega, luz oscura, / gloria triste, vida muerta» (Rodrigo Cota de Maguaque, f. 1498)
[El amor es] «hielo abrasador, es fuego helado, / es herida que duele y no se siente...» (Francisco de Quevedo, 1580-1645).
«Placeres espantosos y dulzuras horrendas» (Charles Baudelaire, 1821-1867).
«Beatriz era alta, frágil, muy ligeramente inclinada; había en su andar (si el oxímoron es tolerable) una como graciosa torpeza, un principio de éxtasis» (Jorge Luis Borges, 1899-1986: El aleph).
«En la figura que se llama oxímoron, se aplica a una palabra un epíteto que parece contradecirla; así los gnósticos hablaron de una luz oscura; los alquimistas, de un sol negro» (Jorge Luis Borges: El zahir).
«Mis libros están llenos de vacíos» (Augusto Monterroso, 1921-2003).