domingo, 9 de agosto de 2015

La poesía está en todas partes: "Uma porta abre-se" (Castillo de Marvao - Portugal)


La poesía está en todas partes: Castillo de Marvao (Portugal) 


[Uma porta abre-se...] 

Uma porta abre-se lentamente 
depois das tempestades 
depois do medo depois do sono 

Uma porta abre-se apenas 
aos irmãos aos mortos 
aos viajantes sem nome 

Uma porta abre-se com uma chave 
com um ombro 
com uma palavra desconhecida 

Uma porta abre-se no último ano 
no último dia 
no último quarto de hora de vida 

Uma porta abre-se para o homem 
que fechou todas 
as portas atrás de si 

Uma porta abre-se para sempre 

(Carlos M. Baptista)


Me encontré recientemente en un visita a Marvao (Portugal) con una instalación de la escultora portuguesa María Leal da Costa en el castillo de esa localidad fronteriza con España. Ocho puertas que contemplé y atravesé para formar parte de la escultura.

Me gustó que un poema sirviera de inspiración para crear esta obra. El poema transcrito al principio de esta entrada en portugués de Carlos M. Baptista, en castellano se traduciría:

[ Una puerta se abre ... ] 

Una puerta se abre lentamente 
después de las tormentas 
después del miedo después del sueño 

Una puerta se abre sólo 
a los hermanos a los muertos 
a los viajeros sin nombre 

Una puerta se abre con una llave 
con un hombro 
con una palabra desconocida 

Se abre una puerta en el último año 
en el último día 
en el último cuarto de hora de la vida 

Una puerta se abre para el hombre 
que cerró todas 
las puertas detrás de él 

Se abre una puerta para siempre 

(Carlos M. Baptista )



Esta  exposición de la escultora María Leal da Costa, se ha inaugurado durante el 2º Festival de Música de Marvão en este año 2015. La instalación titulada "Passagens (Vuelos) -Esculturas habitables", está constituido por un conjunto de ocho puertas. La autora explica las puertas como la confluencia de "momentos que terminan, que se cierran" con otros "que dan comienzo y que se abren, como todo en la vida." Cada puerta (2m x 1m) describe uno de esos momentos, a lo largo de un camino de 23 metros el cual está asociado con el poema de Carlos M. Baptista. Los materiales utilizados son acero oxidado y mármol.

Cada puerta tiene un motivo, una historia, despierta emociones e interrogaciones. Un árbol, una raíz, la vida, la paz, la conquista, el cuerpo, el ritmo, el huevo, las manos, la luz, la música...

La instalación escultórica se mantendrá expuesta entre el 25 de julio y el 30 de septiembre de 2015 en el patio de armas del castillo de Marvao.

Lamentablemente, no he podido encontrar información del autor del poema pero sobre la escultora localicé la siguiente reseña que aquí os dejo:


MARIA LEAL DA COSTA Natural de Évora (región del Alentejo portugués) donde nació en 1964, la artista plástica Maria Leal da Costa es hoy una artista del mundo. Licenciada en Escultura por la ESBAL, expone colectiva o individualmente desde hace más de dos décadas, nacional e internacionalmente, con amplio reconocimiento y numerosas distinciones. Habla de su trabajo como “una herida que me empuja a buscar lo infinito y lo eterno que está dentro de mí”, que me hace recorrer “un camino de felicidad”. Tiene su taller en la Quinta do Barrieiro, cerca de Marvão, donde se estableció en 1999.






Os dejo una imagen más de la instalación tomada desde la torre del castillo de Marvao. Merece la pena.





2 comentarios:

Iñaki Túrnez dijo...

Gracias, javier. Me ha encantado ese poema, y también la idea de compaginarlo con la escultura. Es curioso lo que se llega a sentir al introducirte en esas obras. Cobran su sentido cuando te introduces en ellas, cuando pasas a formar parte de ellas y no te limitas a contemplarlas.
Un abrazo y buen verano
iñaki

Javier Díaz Gil dijo...

Gracias a ti Iñaki. Es cierto, el espectador de arte no se queda como meo observador, el artista consigue que nos involucremos en la obra y formemos parte de ella y si la poesía anda por medio, mejor que mejor.
Feliz verano también para ti, amigo.
Un abrazo
Javier