jueves, 29 de enero de 2015

Etimología: Homenaje, Investidura, Espaldarazo.

Homenaje, Investidura, Espaldarazo

Hay palabras que usamos cotidianamente que no reparamos en su origen. Si, como yo, te mueve esa curiosidad e investigas de dónde vienen esas voces te pueden llevar a tiempos medievales en los que su significado tenían que ver con ciertas ceremonias feudales. Es el caso de tres palabras que quiero traer hoy a mi blog: homenaje, investidura y espaldarazo.

Lo primero, como siempre hago, es acudir al diccionario de la RAE:
homenaje.

(Del prov. homenatge).

1. m. Acto o serie de actos que se celebran en honor de alguien o de algo.
2. m. Sumisión, veneración, respeto hacia alguien o de algo.
3. m. Juramento solemne de fidelidad hecho a un rey o señor. 

investidura.

1. f. Acción y efecto de investir.

2. f. Carácter que se adquiere con la toma de posesión de ciertos cargos o dignidades. 
espaldarazo.

1. m. Reconocimiento de la competencia o habilidad suficientes a que ha llegado alguien en una profesión o actividad.

2. m. Admisión de alguien como igual en un grupo o profesión.
3. m. Golpe dado de plano con la espada en la espalda para armar caballero. 



Tres palabras que utilizamos habitualmente y que actualmente designan actos sociales en los que una persona o institución, en un acto público, realiza sobre otra persona un reconocimiento o apoyo para una tarea determinada. 

Tres palabras que tienen, como decía, su origen en tres ceremonias feudales.

Recojo de la web Historia Universal, la breve descripción que escribe Luis Portillo, y que nos sirve de aclaración y nos diferencia estos tres actos:

Ceremonias en la Edad Media
Eran los pactos que se daban ente los señores feudales y sus vasallos, o feudatarios, como parte de las relaciones vasalláticas, estableciendo así vínculos feudales y de jerarquía. Estos pactos eran de carácter vitalicio y bilateral; actos jurídicos en los cuales las personas que pactaban debían ser libres. Los pactos se celebraban con una ceremonia que se practicaba con la solemnidad de un culto religioso. 
El homenajeEl Homenaje en la edad media fue la ceremonia en la que un vasallo reverenciaba y sumisamente se comprometia a jurar lealtad a su señor feudal, recibiendo a cambio un título simbólico a su nueva posición (investidura). Fue un reconocimiento simbólico para el señor que el vasallo era, literalmente, su hombre.
Tenía un origen bárbaro el noble juraba lealtad a su señor feudal, convirtiéndose en su vasallo, “su hombre”; por el cual debía cumplir con la renta, obligaciones y servicio. Según la condición del vasallo, el juramento lo hacía de pie o de rodillas, se tomaban las manos y a veces hasta se besaban. 
La investiduraConsistía en la entrega simbólica del bien concedido por el señor feudal a su vasallo; es decir, del feudo o beneficio, pero representando en la ceremonia por la entrega de un puñado de tierra, una rama de árbol, etc.
Inicialmente se formalizaba con la entrega de una espada, luego se hacía con la entrega de la tierra y, posteriormente, se hacía con la redacción de un documento de reconocimiento feudal, por medio del cual el vasallo reconocía como señor a su señor feudal.
El elemento real del contrato del vasallo era el bien o feudo y generalmente una señoría rural, concedido por el señor feudal. Desde el siglo IX se admitía que quien se recibía el homenaje de un vasallo tenía que concederle, a cambio, un feudo.
El incumplimiento por parte del vasallo implicaba el despojo de su feudo. Por otra parte si el señor feudal incumplía traía como consecuencia la desnaturalización del vasallo que podía abandonar a su señor y procurarse otro mejor.
El espaldarazoSe vinculaba también con los ritos bárbaros. El señor feudal nombraba caballero a un guerrero, no necesariamente de origen noble, para la defensa militar de sus intereses. Previamente, el guerrero debía haber sido escudero y, antes de eso, paje, esto es servicio a otro caballero; también velaba por sus armas, a la mañana siguiente oía misa y comulgaba, le calzaban la espuela derecha y recibía un golpe en la nuca, de esa forma se daba el espaldarazo.

Tres palabras que, como veis, están relacionadas.

Si queréis sabes más sobre el tema, hay una publicación nada extensa y didáctica en la página web de la UNED que os invito a visitar y que detalla la evolución de EL RITO DE ARMAR CABALLEROS EN LA EDAD MEDIA firmado por José Manuel Rodríguez García.
Me he aclarado muchas cosas. Siempre indagar en la etimología es un regalo para el conocimiento.

2 comentarios:

Clari dijo...

interesante informacion. disfruto de conocer los cuentos de decadas pasadas de distintos pueblos.
pronto quiero sacar vuelos baratos a mexico para conocer acerca de los mallas.

Javier Díaz Gil dijo...

Gracias Clari, me alegra que te sea útil.
Saludos
Javier