Papanoeles rampantes(poema para leer el 1 de diciembre)
De fondo se intuye
el cascabel tenaz
del villancico,
los lazos rojos,
el papel de regalo
y la amenaza inminente
de las cenas de empresa.
Acechan las luces de colores
y papanoeles rampantes
en los balcones.
No existe refugio que aisle,
sueño prolongado
(ese es el drama)
que nos despierte
dentro de seis semanas.
© Javier Díaz Gil
5/12/2009
6 comentarios:
Bueno, siempre puede uno/a irse de viaje. Pero cuesta desapuntarse de tanta tradición. Depende de las circunstancias familiares también.
Un abrazo
Pues a mi me encantan. Siempre las espero con alegría. Antes me gustaban mas cuando nos reuníamos todos los hermanos y los niños eran pequeños. Será porque vivo lejos de mis hermanos.
Carlota, Teresa
Este poema, en este tono irónico, quiere ser una forma de "denunciar" todo lo de artificio, comercial e impuesto que tienen estas fiestas. El espíritu navideño se ha convertido en negocio y es lo que no me gusta.
Besos
Javier
Carlota, Teresa
Este poema, en este tono irónico, quiere ser una forma de "denunciar" todo lo de artificio, comercial e impuesto que tienen estas fiestas. El espíritu navideño se ha convertido en negocio y es lo que no me gusta.
Besos
Javier
No existe refugio que aisle,duele..cada año tanta pobreza de felicitaciones. Bicos
Maribel, es cierta esa pobreza de felicitaciones... Tienes razón.
Un beso.
Javier
Publicar un comentario