Recogida en disco por primera vez en EP "Pluma en riste" del año 1969 junto a tres canciones más: No pienses, No digas; Proposiciones y Cuantas veces al día. Más tarde la volverá a incluir en en los discos "1975 Año internacional de la mujer" (junto a Pablo Milanés y Noel Nicola) y "Cuando digo futuro" del año 1977.
Esta canción de amor está escrita desde la ausencia. Silvio habla de la ausencia de Velia, pero en esa ausencia nos podemos sentir todos reflejados. ¿Qué debemos hacer ante la ausencia de la amada? Silvio nos da dos opciones: nos queda evitar los recuerdos (No mirar a los mapas, seguir en mí mismo, no andar ciertas calles, olvidar que fue mío una vez cierto libro.)
O enfrentarnos a la ausencia y hacer la canción.
Hacer la canción.
Obligarnos a no olvidar, a escribir y a contarle al ausente, como si estuviera junto a nosotros, que todo está igual, esperando por ti... que seguimos yendo a Teté, semana tras semana, que te siento en su sala aunque ahora no estás.
Y Silvio nos cuenta que es inevitable no caer en la nostalgia (la nostalgia es una forma de felicidad, estoy convencido) y recordar las cosas pequeñas, como pisarte los pies en el tumulto, las madrugadas sin ir a dormir.
Esta canción es toda una lección. Seguimos vivos en las cosas pequeñas pero Silvio nos cuenta también con dos imágenes poderosas al final de la canción (Como un libro salvado del mar, como un muerto que aprende a besar) que de los naufragios y de las ruinas renacemos (esta idea la trata también Silvio en su canción "Las ruinas" compuesta también en 1969 en la que dice cosas como: Del polvo de las ruinas se levanta el amor:/polvo que se respira y de nuevo voló.)
Para los que gustan de conocer algunos datos curiosos sobre el origen de la canción, recojo del blog de Antonio Ibarra, (http://www.lacoctelera.com/silviorodriguez) lo siguiente:
Es para una mexicana, Velia Ramírez. Se la hice en 1969. Ahora está casada con un hombre encantador, se llama Víctor y es trompetista. Cuando voy a México, los tres nos juntamos y comemos. La canción cuenta una época difícil para la revolución cubana. Por eso digo que las ideas son balas y no puedo usar flores por Velia. Y hablo de mapas porque ella vivía en México.
También hay quienes, como Raúl Ríos, dicen que Velia fue una bella mujer mexicana que en los tiempos primeros de la revolución cubana brilló como bailarina en Cuba. La leyenda dice que Velia logró atrapar el corazón de Silvio para luego abandonarlo y regresar a su país, México. Silvio, melancólico, compuso en memoria de ese amor una de las canciones más conmovedoras de su repertorio.
Teté:Teté Vergara [1914-1981] fue una cantante, actriz y escritora cubana que, en torno a 1965, enseñó a Silvio lo que fue la vida del artista en otros tiempos. A ella le dedicó la canción Monólogo.
Gracias, Antonio, por estos datos.Os dejo aquí la letra de la canción, podéis leerla mientras veis el video de Silvio interpretándola.
Disfrutadla.
Hay días en los que, como dice Silvio, yo quisiera ser viejo y sabio y poder decir cuanto aquí no he sabido decir...
Disfrutad la canción. Merece la pena.
DE LA AUSENCIA Y DE TI, VELIA
Ahora sólo me queda
buscarme de amante
la respiración.
No mirar a los mapas,
seguir en mí mismo,
no andar ciertas calles,
olvidar que fue mío
una vez cierto libro.
O hacer la canción.
Y decirte que todo esta igual:
la ciudad, los amigos y el mar,
esperando por ti.
Sigo yendo a Teté
semana tras semana
¿te acuerdas de allá?
Hoy habló de fusiles
despidiendo muertos.
Yo sé que ella me ama,
es por eso tal vez
que te siento en su sala,
aunque ahora no estás.
Y se siente en la conversación,
o será que tengo la impresión,
de la ausencia y de ti.
No quisiera un fracaso
en el sabio delito
que es recordar,
ni en el inevitable
defecto que es
la nostalgia de cosas
pequeñas y tontas
como en el tumulto
pisarte los pies.
Y reír y reír y reír,
madrugadas sin ir a dormir...
Sí, es distinto sin ti.
Muy distinto sin ti.
Las ideas son balas
hoy día y no puedo
usar flores por ti.
Hoy quisiera ser viejo
y muy sabio
y poderte decir
lo que aquí
no he podido decirte:
hablar como un árbol
con mi sombra hacia ti.
Como un libro salvado del mar,
como un muerto que aprende a besar,
para ti, para ti,
para ti, para ti.
(1969)
Y, como decía, os dejo este video grabado en el Teatro Karl Marx de La Habana en el que Silvio interpreta esta preciosa canción:
Y como documento curioso, en Youtube está esta entrevista a Velia (en dos partes). La artista mexicana que enamoró a Silvio en el año 1969, un amor platónico del que nació esta bella canción. Doy las gracias a la tropa valenciana por este video, grabado en el encuentro que la Tropa cósmica celebró en Valencia (España) en el año 2000.
Entrevista a Velia (1ª parte)
Entrevista a Velia (2ª parte)